LAS MENTIRAS DE LOS MUSULMANES - EL ISLAM ES TOLERANTE CON
OTRAS RELIGIONES
La mentira:
Gracias al islam, otras religiones han prosperado. Los musulmanes respetan a las personas de otras religiones y todos los días rezan por ellos. A los musulmanes se les enseña a proteger a los judíos y Cristianos que son considerados la gente del libro. Nunca deben hacerles daño. En la Sura 109, el Corán dice:
-A ti, a tu religión, a mí la mía.
La verdad:
Esta es una de las mentiras de los musulmanes que me más me hizo. Ninguna religión ha florecido gracias al islam. En realidad, las personas de otras religiones siempre se reducen a "minorías" después de la persecución y la discriminación que sufren por parte de los musulmanes pacíficos y tolerantes. Algunos se convierten al islam por la fuerza bajo la amenaza de la espada. Otros después de una salvaje tortura. Otros después de mucho tiempo mueren de hambre en la cárcel.
El concepto que los musulmanes tienen sobre la "tolerancia", es lo que las personas institucionalizadas definen como discriminación. En los países islámicos, los judíos y los Cristianos no tienen los mismos derechos y libertades religiosas que los discriminadores musulmanes. No pueden compartir ni mostrar su fe, ni construir casas de culto sin permiso. Tienen que llevar ropa distintiva o cortar el pelo de una manera particular que indica su posición de inferioridad y humillación. No tienen los mismos derechos legales que los musulmanes, e incluso deben pagar un impuesto especial (la jizya) que suele ser el 50% del salario de media que se recibe en ese país. Se les pone un sello en su DNI para indicar que no son musulmanes para que los empresarios no les den trabajo. Si no pueden satisfacer los requisitos del recaudador de impuestos, primero serán torturados y luego terriblemente asesinados siempre delante de otros no creyentes para instaurar terror en sus corazones.
Durante cientos de años, los Otomanos Turcos llevaron a miles de Cristianos a la Europa ocupada y los obligaron a convertirse en guerreros musulmanes (Jannisaries). Esta estrategia de tratarlos como ciudadanos de tercera clase, discriminarlos, amenazarlos y torturarlos fue muy exitosa en la conversión de tantas personas a lo largo de los siglos. Los valientes que se negaron, se enfrentaron a dificultades económicas y sociales y, por supuesto, a la salvaje ejecución. Esta estrategia persiste hasta nuestros días. De ahí que el Islam se una religión con miles de millones de creyentes.
La superioridad política del islam establece aún menos tolerancia para los hindúes y ateos porque no están incluidos en la "gente del libro". El coran le dice a los musulmanes que "luchen en el nombre de allah" hasta que "la religión sea sólo para allah".
Tamerlane y otros guerreros musulmanes mataron a decenas de millones de hindúes y budistas, y desplazaron y forzaron a millones durante los últimos mil años. Cada mes hay muchos casos de Cristianos decapitados por islamistas en Somalia. En Irán muchos Cristianos son encarcelados o ejecutados bajo las conocidas acusaciones falsas.
Lo peor es que la mayoría de los musulmanes no sienten vergüenza por sus valores islámicos con respecto a la intolerancia y a la persecución. Hay más de quinientos versos en el Corán que hablan del odio de Allá por los no musulmanes y el castigo que él ha preparado para ellos en el más allá.
También hay unos pocos versos pacíficos y tolerantes, pero se dirigen sólo a los musulmanes.
"Para ti tu religión, para mí la mía".
Este verso se narró en los primeros años del Islam. Mahoma no tenía ningún poder, y por lo tanto no había otra opción que la de ser "tolerante" hacia los demás. La tolerancia se desvaneció años después cuando volvió con el poder militar. Exigió el desalojo o la muerte de cualquier persona que no se convirtiera a su tolerante religión.
La tolerancia significa permitir a las personas de otras religiones practicar libremente su religión. Esto es exactamente lo que los musulmanes exigen en Occidente cuando vienen como inmigrantes o refugiados. Esta tolerancia es exactamente la que no existe en los países de donde provienen.
La mentira:
Gracias al islam, otras religiones han prosperado. Los musulmanes respetan a las personas de otras religiones y todos los días rezan por ellos. A los musulmanes se les enseña a proteger a los judíos y Cristianos que son considerados la gente del libro. Nunca deben hacerles daño. En la Sura 109, el Corán dice:
-A ti, a tu religión, a mí la mía.
La verdad:
Esta es una de las mentiras de los musulmanes que me más me hizo. Ninguna religión ha florecido gracias al islam. En realidad, las personas de otras religiones siempre se reducen a "minorías" después de la persecución y la discriminación que sufren por parte de los musulmanes pacíficos y tolerantes. Algunos se convierten al islam por la fuerza bajo la amenaza de la espada. Otros después de una salvaje tortura. Otros después de mucho tiempo mueren de hambre en la cárcel.
El concepto que los musulmanes tienen sobre la "tolerancia", es lo que las personas institucionalizadas definen como discriminación. En los países islámicos, los judíos y los Cristianos no tienen los mismos derechos y libertades religiosas que los discriminadores musulmanes. No pueden compartir ni mostrar su fe, ni construir casas de culto sin permiso. Tienen que llevar ropa distintiva o cortar el pelo de una manera particular que indica su posición de inferioridad y humillación. No tienen los mismos derechos legales que los musulmanes, e incluso deben pagar un impuesto especial (la jizya) que suele ser el 50% del salario de media que se recibe en ese país. Se les pone un sello en su DNI para indicar que no son musulmanes para que los empresarios no les den trabajo. Si no pueden satisfacer los requisitos del recaudador de impuestos, primero serán torturados y luego terriblemente asesinados siempre delante de otros no creyentes para instaurar terror en sus corazones.
Durante cientos de años, los Otomanos Turcos llevaron a miles de Cristianos a la Europa ocupada y los obligaron a convertirse en guerreros musulmanes (Jannisaries). Esta estrategia de tratarlos como ciudadanos de tercera clase, discriminarlos, amenazarlos y torturarlos fue muy exitosa en la conversión de tantas personas a lo largo de los siglos. Los valientes que se negaron, se enfrentaron a dificultades económicas y sociales y, por supuesto, a la salvaje ejecución. Esta estrategia persiste hasta nuestros días. De ahí que el Islam se una religión con miles de millones de creyentes.
La superioridad política del islam establece aún menos tolerancia para los hindúes y ateos porque no están incluidos en la "gente del libro". El coran le dice a los musulmanes que "luchen en el nombre de allah" hasta que "la religión sea sólo para allah".
Tamerlane y otros guerreros musulmanes mataron a decenas de millones de hindúes y budistas, y desplazaron y forzaron a millones durante los últimos mil años. Cada mes hay muchos casos de Cristianos decapitados por islamistas en Somalia. En Irán muchos Cristianos son encarcelados o ejecutados bajo las conocidas acusaciones falsas.
Lo peor es que la mayoría de los musulmanes no sienten vergüenza por sus valores islámicos con respecto a la intolerancia y a la persecución. Hay más de quinientos versos en el Corán que hablan del odio de Allá por los no musulmanes y el castigo que él ha preparado para ellos en el más allá.
También hay unos pocos versos pacíficos y tolerantes, pero se dirigen sólo a los musulmanes.
"Para ti tu religión, para mí la mía".
Este verso se narró en los primeros años del Islam. Mahoma no tenía ningún poder, y por lo tanto no había otra opción que la de ser "tolerante" hacia los demás. La tolerancia se desvaneció años después cuando volvió con el poder militar. Exigió el desalojo o la muerte de cualquier persona que no se convirtiera a su tolerante religión.
La tolerancia significa permitir a las personas de otras religiones practicar libremente su religión. Esto es exactamente lo que los musulmanes exigen en Occidente cuando vienen como inmigrantes o refugiados. Esta tolerancia es exactamente la que no existe en los países de donde provienen.
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